Juan josé campanella estuvo acompañando a los familiares y partició del acto.
En el hall central de la estación de Once, exactamente a las 8:32, hora en que sucedió la tragedia, se hizo sonar una sirena en memoria de las víctimas, en medio del profundo dolor, tristeza y emoción de los presentes. A la jornada la denominaron "12 horas por justicia". La madre de Lucas Menghini manifestó :"Si el Ministro Randazzo se subiera en la estación de Moreno a las 7:00 de la mañana y viaja hasta Once como cualquiera de nosotros, va a saber de lo que hablan los usuarios de este tren". Mónica Pontirolli, madre de Tatiana, otra de las 51 víctimas fatales de la tragedia expresó: "Nos pone mal la lentitud que hay en la justicia". También se instaló una muestra fotográfica y se colgaron desde el techo en forma de guirnaldas, gran cantidad de papeles con imágenes de una vaca en cuya frente se leía la frase "No somos animales”.